La Sporty va cumpliendo años y necesita sus mimos. Tras 18 años de carreteras en todo tipo de clima, sobre todo por la sal de las carreteras, y el vivir en cerca del mar, los escapes ya estaban un poco oxidados.
No se aprecia a simple vista, pero el óxido está ahí, trabajando. Seguramente también es buen momento para revisar el chasis y ver si necesita mantenimiento.
Para su revisión se debe de desmontar los escapes completos. Necesitamos un vaso de 1/2 para las tuercas de los colectores, allen y fijas variadas en pulgadas. Y darle a todo con wd40 antes de aflojar.
Para lijar he usado un disco de mil hojas y una radial.
Sobre todo el escape delantero estaba muy rojo y no era de ira ni calor.
El trasero estaba mejor.
Desmontando no puede faltar la birra ni la música.
Con todo bien sujeto a darle brillo.
Cuidado no quemar nada con las chispas de la radial. Usar gafas de protección.
Ya casi lo tenemos.
Ahora a pintar.
Le di 4 capas de pintura “especial” para escapes comprada en el Leroy por 6€
Dejar secar con paciencia y a montar.
El acabado no importa pues no se verá tras los escudos.
La cocción se la hice encendiendo la moto un rato.
La dejé enfriar mientras recogía el taller y luego una vuelta para hacer el vermú con los colegas.
Falta poner los protectores cromados, que los montaré mañana.
Con tanta birra no se pude acabar la faena bien.
En la puerta del bar.
Tiempo unas dos horas de taller y dos horas de bar, o mas.
Materiales
Un disco mil hojas 3€
Spray anticalorico negro mate 6€
10 birras 5€
Birras y animarse.
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